Cuando en España aún estábamos a vueltas con esa droga misteriosa llamada píldora anticonceptiva y el divorcio era cosa innombrable, los progresistas y enrollados suecos ya iban por la liberación de la mujer y la revolución sexual. La sociedad modelo de la Suecia de los 70, sin embargo, escondía una buena montaña de mugre bajo la alfombra. Call Girl cuenta una trama policíaca -basada en un caso real- en la que altos cargos políticos se ven envueltos en un escándalo de prostitución que seguimos a través de Iris, adolescente rebelde que termina enredada en el “negocio” mientras la policía hace la vista gorda.

Gentlemen es la historia de los carismáticos hermanos Morgan, sobre el mito y la realidad. Una combinación de romance y thriller en una épica historia en la Europa de la posguerra.

André y Vera son compañeros de vida y de negocios e intentan poner en marcha una aplicación móvil de salud reproductiva femenina. En vísperas de un programa de fin de semana para start-ups con futuro, en el que pretenden atraer la atención de posibles inversores, Vera prueba la hipnoterapia para dejar de fumar. Sin embargo, la experiencia tiene un efecto secundario inesperado: empieza a perder todas sus inhibiciones sociales.

Erika lo tiene todo: un buen trabajo, un montón de amigos y una relación seria. Hasta el día en que todo se desmorona. De repente esta vida perfecta no significa nada, y los sentimientos que una vez fue capaz de controlar ya no están a su alcance. Comienza a ir a terapia de grupo con otras personas que sufren diversas formas de trauma. Un día Erika y este ecléctico grupo de cuatro personas deciden tomar el asunto por sus propias manos y van juntos en busca de una salida. Comienzan a registrarse en hoteles, un lugar de total anonimato donde uno puede despertar como una persona diferente.