Los que van a morir te saludan
8/213
Roma, 79 a. C. El pueblo, aburrido, inquieto y cada vez más violento, se ve contenido por dos cosas: comida gratis y espectáculos para su entretenimiento. Cuando las masas empiezan a hastiarse y a pedir sangre, se erige un estadio diseñado para celebrar combates de gladiadores: el coliseo. Bajo él trabajan y viven miles de personas, y entre ellas se cuentan millares que morirán por los juegos.