Las praderas cubren una cuarta parte de toda la tierra y sustentan las vastas concentraciones de vida salvaje, pero para sobrevivir aquí los animales deben soportar los cambios de estación más hostiles del planeta. Desde el extraño antílope saiga de Asia hasta los osos hormigueros gigantes de Brasil, los animales de las praderas se han adaptado de manera extraordinaria para hacer frente a estos extremos. En el inundado Okavango, los leones se enfrentan a un formidable búfalo en una batallas épica, en la sabana las abejas se aprovechan de los elefantes para capturar insectos y, en la helada tundra septentrional, los caribúes se embarcan en grandes migraciones seguidas por hambrientos lobos árticos.