Cuando los cuerpos de los prisioneros fugitivos son encontrados en el bosque y, en el laboratorio, los frascos de sangre desaparecen repentinamente, Niemans y Camille se dan cuenta de que su estancia allí durará más de lo esperado. Niemans se da cuenta de que tenía razón: Cernac solicitó su traslado a la UMD con el único objetivo de escapar. Es durante una noche de tormenta cuando Niemans y Camille tendrán que actuar. Mientras los mercenarios rodean a la UMD para liberar a Cernac, y un asesino acecha para terminar el trabajo, Niemans y Camille tendrán, más que nunca, permanecer juntos para sobrevivir hasta la madrugada...